viernes, 17 de julio de 2009




María Magdalena, te pido me ayudes a reconocer a Cristo en mi vida evitando las ocasiones de pecado. Ayúdame a lograr una verdadera conversión de corazón para que pueda demostrar con obras, mi amor a Dios. Amén.

Señor Jesús, que consolaste las lágrimas de María Magdalena junto al sepulcro abierto, te rogamos que tu Iglesia aumente su fe en el misterio de tu resurrección y corra a proclamar la gloria de tu vida a todas las regiones de la tierra y a todos los pueblos. Por Jesucristo, Nuestro Señor. Amén.